Las mejores recomendaciones, consejos, ideas y videos a la hora de escoger lo mejor para tu bebé.
Llegamos al último artículo de nuestra serie dedicada a hablar de los preparativos básicos para la llegada de tu bebé, hoy nos centraremos en los imprescindibles para salir de casa, ya sea de paseo o de viaje.
Ya os adelantamos que aquí, como en casi todas las compras de las que hemos hablado anteriormente, hay decisiones importantes a tomar que van a influir en los productos que miraremos. Por ejemplo, ¿Váis a portear a vuestro bebé? ¿Querréis que viaje en el coche a contramarcha cuánto más tiempo mejor?
En función de las respuestas el tipo de productos que necesitaréis serán unos u otros. En todo caso, nosotras os los comentamos todos y vosotros ya elegiréis.
Para moverse en coche es fundamental tener un grupo cero que permita llevar al bebé bien protegido y, a su vez, el cuco también es recomendable puesto que en los primeros meses de vida es importante colocar al bebé totalmente estirado con la espalda recta para evitar malformaciones debidas a la posición.
Si lo que queréis es llevar a vuestro bebé pegadito a vosotros desde que nazca deberéis elegir una buena mochila portabebés ergonómica que incluya el cojín para bebés de nacimiento.
Con la silla de paseo deberás pensar en la colchoneta o funda protectora, muy útil para proteger la silla y mantener al bebé fresquito en verano, y en los sacos para proteger a tu peque del frío en invierno.
Y con eso creemos que tenéis suficiente en lo que pensar, ¿no? No os agobéis con los preparativos, dejaros asesorar, y disfrutad de cada momento. Poco a poco lo iréis eligiendo todo y lo tendréis listo para cuando llegue vuestro tesoro.
El primer baño de nuestro bebé es un momento bien especial tanto para él como para nosotros, los padres. Los primeros días en casa, mientras no se le ha caído aún el cordón umbilical, lo aconsejable es realizar la higiene en seco. Es decir, colocando al bebé en el cambiador y limpiar su cuerpecito suavemente con un esponja natural húmeda. A fin de evitar infecciones y que el ombligo se mantenga lo más seco posible para su correcta cicatrización no es recomendable bañar al bebé hasta 24-48 horas después de que se le haya caído el cordón umbilical.
El primer día que bañamos a nuestro bebé debemos tenerlo todo bien preparado para estar tranquilos, garantizar su seguridad y hacer que la experiencia sea agradable tanto para él como para nosotros. Para que no os dejéis nada vamos a hacer una pequeña lista de las cosas que necesitaréis:
Seguimos con la la serie de posts que iniciamos la semana pasada sobre los preparativos para la llegada de nuestro bebé. Hoy vamos a centrarnos en la hora de comer.
La verdad es que aquí hay una decisión importante a tomar antes de empezar a equiparnos: ¿le daremos biberón o optaremos por lactancia materna? La respuesta influirá bastante en las compras que acabaremos haciendo puesto que si tenemos claro que queremos darle leche de fórmula compraremos biberones, tetinas, calienta biberones o esterilizadores. Sin embargo, si queremos ir por el camino de la lactancia materna nos convendrá más mirar sacaleches, cojines de lactancia,....
Si ya tienes la decisión tomada, fantástico. Sea la que sea, será perfecta. Si aún tienes dudas, te animos a leer el post que escribimos sobre la Lactancia Materna en el que encontrarás información sobre esta opción de alimentación para tu bebé.
Una vez dicho esto, ¡Empezamos con nuestra lista!
Leche artificial
- Biberones y tetinas: Aunque acabaréis utilizando varios biberones al día, al principio lo mejor es comprar dos o tres para ver cúal gusta más a tu bebé. Son pequeños, sí, pero ¡ya tienen sus preferencias!
- Calienta biberones: Calentar los biberones en el microondas no es demasiado recomendable, puesto que el calentamiento no es uniforme y cuando comprobamos la temperatura nos podemos equivocar fácilmente. Lo ideal es calentarlos al baño maría, pero como muchos optan por adquirir un calienta biberones que facilite la tarea. Lo cierto es que resultan bastante útiles, sobretodo por las noches, que al principio son durillas y todo lo que os facilite las tomas será bienvenido.
- Esterilizador y cepillo limpiabiberón: Los esterilizadores són muy prácticos y útiles, aunque si lo prieferes también puedes eliminar las bacterias hirviéndo los biberones en agua. El cepillo limpiabiberón, parece innecesario, pero de verdad que es súper práctico para facilitar la eliminación de los restos de leche del biberón después de cada toma.
- Termo: Perfecto para mantener el agua caliente cuando sales de casa.
Lactancia materna
- Sujetadores de lactancia: Muy aconsejables durante para hacerte el día a día más fácil durante la lactancia.
- Discos absorventes: Evitarán que se mache tu ropa en el caso de sufrir alguna pérdida de leche.
- Extractor de leche, bolsas de almacenaje y biberones: Si te incorporas al trabajo mientras aún das el pecho a tu bebé y éste aún no ha empezado con la alimentación complementaria, te será muy útil para dejar preparados algunos biberones con tu leche para que se la pueda dar el familiar que se quede a cargo de tu peque. Para hacerlo necesitarás un sacaleches (manual o automático), bolsas de almacenaje para poder guardar la leche correctamente en el congelador o nevera, y algun biberón.
- Cojín de lactancia: Un artículo ideal tanto si das biberón como si amamatas. Es comodísimo para ti y tu bebé y ayuda a evitar dolores de espalda por malas posturas. Además, también es muy útil para ayudarte a dormir cómodamente durante los últimos meses de embarazo.
Finalmente, elijas la modalidad que elijas, ¡no olvides equiparte con varios baberos!
A partir de aquí, aún tienes tiempo hasta que te toque empezar a mirar las vajillas, la trona, los robots de cocina, etc para cuando empiece con la alimentación complementaria. :-)
Los primeros 3-4 meses de embarazo pasan casi sin darte cuenta, a no ser que te encuentres mal que entonces se te hacen ¡eternos! En todo caso, estos primeros meses no acostumbramos a pensar demasiado en lo que necesitaremos para la llegada de nuestro bebé, pues estamos más pendientes de otras cosas. Pero alrededor del 5-6 mes ya vamos entrando en materia.
De golpe todo el mundo tiene una opinión sobre lo que necesitamos y lo que no. Estan los que dicen que nos dejarán la cuna, los que nos puede prestar el cochecito, los que aconsejan que no nos gastemos demasiado en tal cosa ya que la utilizaremos poquísimo y los que nos advierten de que no compremos mucha ropa de primera puesta porque en nada se le quedará pequeña. Todos los comentarios son bien intencionados y en muchos casos muy útiles, pero nadie mejor que nosotros sabe qué es lo que más nos conviene y, sobretodo, lo que más ilusión nos hace. Al fin y al cabo, la llegada de un hijo es un momento único, especial y lleno de ilusión.
Lo mejor para elegir bien qué comprar, y no excedernos ni quedarnos cortos, es escuchar las experiencias y consejos de quienes han pasado por la experiencia pero, sobretodo, buscar un equilibrio entre nuestro presupuesto y nuestras necesidades e ilusiones.
En base a esto, hoy empezamos una serie de post dedicados a orientarte un poco sobre lo que serían los básicos para preparar la llegada de tu bebé.
Empezamos por las cositas para su descanso ¡Vamos a ello!
- Minicuna o moisés: Ahora las minicunas que favorecen el colecho, como la Next2me de Chicco o la BabySide de Jané, son las más populares puesto que son muy prácticas, facilitan la lactancia materna y tienen un tamaño que permite usarlas durante más tiempo. Aún y así, hay quien prefiere la minucuna o moisés tradicional del los cuáles encontramos multitud de alternativas en el mercado con una amplia gama de precios.
- Cuna: En el caso de que comprés minicuna o moisés puedes esperar un poco a comprar la cuna, puesto que los primeros meses no va a dormir en ella. Aquí también tienes varias alternativas a elegir. Puedes comprar la cuna sola, la cuna con cambiador o bien una cuna convertible, que acostumbra a incorporar la cuna, una cajonera, el cambiador, una cama nido o unos cajones inferiores de almacenaje. Esta opción permite que, una vez ya no se ulitice la cuna, se pueda transformar en cama. Muchos padres optan por esta última alternativa, ya que añadiendo el armario y las estanterías a juego tienen la habitación completa montada. Es una opción muy práctica pero la inversión también es más elevada.
- Colchón, sábanas y protectores: Una vez elegida la cuna o minicuna, toca vestirla. Lo más recomendable al principio es adquirir, como mínimo, un par de sábanas y protectores de colchón. Es fácil que se ensucien con lo que siempre va bien tener algun juego de repuesto.
- Pijamas: Sobretodo si nace en los meses más fresquitos.
- Vigila Bebés: Para tenerlo controlado mientras duerme en la habitación.
Estos son los básicos de los básicos, a partir de aquí puedes añadir todo lo que quieras: cojines anti-vuelco, arrullos, muselinas, lamparitas, móviles musicales, proyectores, peluches,...
Eso sí, recuerda en todo momento que lo más seguro para un recién nacido es dormir boca arriba, sin almohada y sin ningún objeto en la cama, procurando siempre que no esté demasiado abrigado y que no se pueda enredar o tapar por completo con las sábanas.
El primer día de guardería es un momento difícil tanto para niños como para padres. Lo cierto es que, en ocasiones, es bastante más difícil de llevar para los padres que para los niños, especialmente para el progenitor que ha estado más tiempo cuidando del niño hasta el momento.
Aunque la Asociación de Española de Pediatría en Atención Primaria (AEPap) recomienda que los niños no empiecen la guardería antes de los dos años para evitar enfermedades, la conciliación laboral en nuestro país no nos da mucho margen de maniobra a los padres trabajadores. En el mejor de los casos, la madre puede alargar las 16 semanas de baja maternal, juntando vacaciones y permiso de lactancia, hasta las veinte y pocas semanas. Total que estamos hablando de que las madres trabajadoras más afortunadas se plantan en los... ¡6 meses! Triste, pero real.
Para evitar llevar al niño a la guardería a esa edad tan temprana muchas famílias hacen malabares para encajar horarios, especialmente de padres y abuelos, para cuidar al niño hasta que sea más mayor. Aún y así, muchos no tienen más opción que llevar a su hijo a la guardería antes de los recomendados 2 años.
Si este es vuestro caso, armaros de paciencia y positivismo y tomad nota de algunas recomendaciones que facilitarán la adaptación de vuestro peque a la guardería
- Todas las guarderías, sean públicas o privadas, ofrecen el conocido periodo de adaptación para que el niño se vaya acostumbrando al cambio de forma progresiva. Aunque para muchos padres trabajadores esto también es complicado de compaginar con los horarios laborales, lo mejor es no tener prisas y medir el tiempo de adaptación en función siempre del estado emocional del niño. Habrá niños que en una semana estarán más que adaptados y otros que necesitarán un mes. Cada uno tendrá sus tiempos y es importante respetarlos.
- Hablad de la guardería al niño para que no le resulte una situación totalmente desconocida. Sobretodo es vital hacerlo de forma positiva, está claro. Le podéis hablar de los compañeros, de las profesoras, de los juegos que harán, los cuentos que contarán, etc.
- Evitad que delante del niño se hagan comentarios del tipo: ¡Pobrecito, tan pequeño y a la guarde! o ¡En la guarde sí que te enseñarán a comer!. Como puedes suponer estos comentarios no ayudan en nada, al contrario, generan negatividad alrededor de la guardería.
- Intentad que durante la adaptación el niño acuda a la guardería de forma continuada. En el caso de que no sea posible, tened en cuenta que el periodo de adaptación se alargará.
- Las semanas antes empezad a adaptad los horarios de comer y dormir a los que tendrá cuando vaya a la guardería, así el cambio no será tan brusco.
- Si vuestro hijo tiene un peluche favorito, o usa chupete habitualmente, o tiene un muñeco con el que va a todas partes, dejad que se lo lleve a la guardería durante este periodo de adaptación. Les aportará confianza y seguridad.
Cada guardería os dará sus directrices para llevar a cabo este proceso de la mejor forma posible, confiad en la profesionalidad y la experiencia de las educadoras. Consultadles cualquier duda que tengáis, ya que si vosotros dudáis o estáis angustiados vuestro peque lo notará.
Lo más probable es que la guardería que elijas te facilite una lista con las cositas que tienes que preparar. Entre otras cosas, puede incluir: pañales, toallitas, crema para el culete (si utilizáis), una bata, un cuento indicado para su edad, baberos y recipientes para la comida (en el caso de que tu hijo se quede a comer y le lleves tu la comida), mochila o bolsa de tela para las mudas, vaso con asas para beber, etc.
En breve seguro que veréis como vuestro hijo va contentísimo a la guarde ¡Ánimo!
Si vas a ser madre/padre en los próximos meses seguro que en más de una ocasión habrás leído sobre los pros y contras del famoso colecho. O quizás tengas ya a tu bebé y te encuentres que sin tenerlo previsto, para no pasarte la noche levantándote una y otra vez, acabas durmiendo con él en tu cama.
La relación entre el colecho y el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) ha sido tema de estudio durante los últimos años. Varias investigaciones concluyen que el colecho aumente el riesgo de SMSL. Sin embargo, dormir con el bebé favorece la lactancia materna que, a su vez, tiene un efecto protector frente a la muerte súbita del lactante. Entonces...colecho ¿sí o no?
El Comité de Lactancia Materna y el Grupo de Trabajo para el Estudio de la muerte Súbita Infantil de la Asociación Española de Pediatría (AEP) elaboraron un documento consensuado que recoge las recomendaciones básicas para llevar a cabo un colecho seguro y evitar riesgos.
Según estos especialistas, la forma más segura de de dormir para los lactantes menores de 6 meses es en su cuna, boca arriba, cerca de la cama de sus pares. Por otro lado, la recomendación es no practicar colecho en:
Lo ideal...utilizar una cuna "side-car", como por ejemplo la Next2Me de Chicco o la Babyside de Jané. Este tipo de cunas, que permiten bajar uno de los laterales y pegarlas a tu cama, estan totalmente aceptadas por los expertos como práctica segura y proporcionan casi todas las ventajas del colecho, sin incurrir a los riesgos que conlleva dormir con el bebé en tu cama durante los primeros meses de vida.
Cada vez más padres y madres eligen portear a sus bebés, ya sea en mochila portabebés o en fulares de porteo, como forma de crianza.
No se trata de ningú método ni nuevo ni revolucionario, pues la mayoría de mamíferos transportan así a sus crías y nuestros antepasados lo estuvieron haciendo durante siglos, ya que así podían realizar todas las tareas llevándose a su hijo a todas partes, protegiéndolo de todo peligro.
La verdad es que llevar a tu hijo encima es una experiencia preciosa que aporta múltiples beneficios tanto a los bebés como a papá y mamá.
Beneficios del porteo para los bebés
Los bebés porteados son más tranquilos, lloran menos y duermen mejor. Además son más sociables, ya que se integran totalmente en la vida cotidiana de los padres, participando en los paseos, charlas, etc.
El porteo regula su temperatura y ritmo respiratorio y digestivo, con lo que disminuyen también los terribles cólicos. Favorece también su desarrollo psicomotor y les estimula los sentidos de la vista y el tacto.
Estar pegaditos a papá o a mamá les aporta un gran bienestar ya que sentirse tan cerca les calma la ansiedad, les proporciona un agradable confort y les hace sentir increíblemente seguros y protegidos,
Elijas fular o mochila, la posición que adopta el bebé es totalmente adecuada y favorece el desarrollo de la columna, fémur y caderas.
¿Te animarás a portear? Visita nuestra selección de mochilas y fulares de porteo.
Si necesitas asesoramiento no dudes en preguntarnos y, si lo deseas puedes venir a vernos a nuestra tienda física, y te enseñaremos como colocarte la mochila o fular correctamente.
¡Feliz porteo!
Fuentes: GuiaInfantil.com
Hoy nos ponemos muy serios para hablar de un tema que nos encoge el corazón cada año: los ahogamientos infantiles en medios acuáticos. Según el Primer Informe Nacional de Ahogamientos de Menores, en lo que llevamos de año el número de ahogamientos de niños en el agua ha aumentado un 92% respecto a 2016.
Estos datos, junto con el hecho de que el ahogamiento es la segunda causa de muerte infantil en nuestro país, hacen necesarias acciones de concienciación intensas que hagan que los padres y madres extrememos las precauciones en cualquier medio acuático que acudamos con nuestros pequeños.
Tanto es así que la Asociación Nacional de Seguridad Infantil, conjuntamente con las empresas de socorrismo acuático Emergencias7000 y el Grupo segurbaby.com, está llevando a cabo la campaña #OjoPequeAlAgua con el objetivo de concienciar a la población sobre este grave problema y dar la máxima difusión a las medidas de prevención para garantizar la seguridad de los menores, tanto en playas como piscinas, ríos o pantanos.
#OjoPequeAlAgua cuenta con dos decálogos de prevención en los que encontramos las principales pautas a seguir para extremanar las precauciones en la playa y en la piscina. Entre otras recomendaciones encontramos:
Mirar al niño cada 10 segundos y colocarnos a una distancia que nos permita socorrerle en un máximo de 20 segundos en caso de crearse una situación de peligro.
Exista o no servicio de socorristas, sea en la playa o en la piscina, no debemos quitar nunca la vista de encima a los niños mientras se bañan. Si vamos en grupo y somos varios adultos podemos definir turnos de vigilancia.
En el caso de las piscinas, debemos mirar si el niño puede llegar solo a ella en un descuido nuestro. En caso que así sea, debemos poner medidas para evitarlo.
Aunque esto no nos exima de estar atentos y extremar precauciones, siempre será mejor que el niño sepa nadar lo antes posible. A partir de los 4-5 meses ya podemos llevar al bebé a cursos de matronatación en piscina para que se vaya familiarizando con el agua, aprenda a flotar y vaya adquiriendo habilidades que le permitirán luego aprender a nadar más fácilmente.
En el caso de que el niño no sepa nadar, especialmente en la playa, lo recomendable es utilizar chaleco (no manguitos ni flotador).
Desde Bebealia te animamos a que accedas a los decálogos completos para disfrutar plenamente y con la máxima seguridad de vuestras vacaciones en el agua.
Te dejamos los enlaces:
¿Aún no tienes bañador para tu peque? Aquí te dejamos unos cuantos modelos para que vaya bien equipado.
Selección de bañadores para bebé Bebealia
¡Al agua patos!
Fuente: Asociación Nacional de Segurida Infantil
Estar embarazada en verano, especialmente si coincide con el último trimestre de gestación, es especialmente agotador. Las altas temperaturas, que ya de por sí son difíciles de llevar para todos, no ayudan nada a que las embarazadas pasen esta recta final de su embarazo con las menores molestias posibles.
En esta época del año es habitual que la mujer embarazada sienta más cansancio, fatiga, mareos, sudoración e incluso dificultad respiratoria. A causa del cambio metabólico que sufre su cuerpo, su temperatura corporal aumenta y percibe el calor con mucha más intensidad.
1. Cuida tu alimentación.
2. Realiza actividad física.
3. Utiliza zapatos/ropa cómoda y transpirable.
Lo mejor es evitar los tejidos sintéticos y utilizar ropa fabricada con tejidos naturales (algodón, lino,...) y de colores claritos. Haz lo mismo con los zapatos, piensa que los pies con el calor acostumbran a hincharse con lo que te será muy útil elegir unos zapatos o sandalias cómodas que no te aprieten el pie y que le ayuden a transpirar.
4. Descansa todo lo que puedas y más.
Reposa siempre que te notes cansada. Intenta dormir todas las horas que puedas durante la noche y haz tu media horita de siesta al mediodía.
5. Protección solar a todas horas.
Durante el embarazo la melanina está más activa y eres mucho más propensa a que te salgan manchas en la piel. Para evitarlo ponte crema protectora con un factor alto siempre que vayas a estar al aire libre, llévate sombrilla si vas a la playa y, si quieres, usa sombreros, pamelas o gorras que te ayuden a proteger la cara.
6. Piernas en alto.
La retención de líquidos y la hinchazón de pies y piernas es más que habitual durante el embarazo, especialmente en verano. Lo que puedes hacer para llevarla mejor es no estar demasiado tiempo de pie quieta, mantener las piernas en alto todo el rato que puedas y beber mucha agua. También te proporcionará cierto alivio darte duchas, alternando agua fría y templada, y realizarte masajes con geles refrescantes. Intenta caminar al menos media hora dos veces por día y dormir tumbada del lado izquierdo, así evitarás presionar la vena cava y mejorará tu circulación.
Esta semana se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna. Durante este periodo (del 1 al 7 de agosto) más de 170 países realizan acciones destinadas a fomentar la lactancia materna y a mejorar la salud de los bebés en todo el mundo.
Así que si estás esperando la llegada de tu bebé y has dedicido que quieres amamantarlo ¡esta es tu semana! En Bebealia somos totalmente respetuosas con la opción de alimentación que elija cada madre, para nosotras lo más importante es que la mamá se sienta cómoda y segura con la opción elegida.
Dicho esto, y a modo de celebración del 25 aniversario de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, hemos decidido hablar de ella y aportar un poco más de información a las madres que quieran optar por esta forma de alimentación para su bebé o a las que todavía no han acabado de decidir.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) la lactancia materna es la forma ideal de aportar a los niños pequeños los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables. Prácticamente todas las mujeres pueden amamantar, siempre que dispongan de buena información y del apoyo de su familia y del sistema de atención de salud. La recomendación de la OMS es realizar lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida y a continuación empezar con la alimentación complementaria, manteniendo la lactancia materna hasta los 2 años o más.
Según informa la AEPED (Asociación Española de Pediatría) en su Guía práctica para padres, existen múltiples beneficios tanto para la madre como para el bebé.
Para la madre:
Para el bebé:
- En la sección del Comité de Lactancia Materna de la AEP
- En la sección de lactancia materna de la web de la OMS
- En la web de IHAN (Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia)
Fuentes: OMS y AEP